
TODO LO QUE SE ENCHUFA SE PUEDE RECICLAR
Fluorescentes, bombillas LED, teléfonos, ordenadores, tabletas, televisores, lavadoras, lavavajillas, secadoras, hornos, cocinas eléctricas, aspiradores, batidoras, planchas, depiladoras, cortapelos, taladros, cortacésped… Todo lo que funciona con electricidad, pilas o combustible se recicla.
Cuando un aparato eléctrico o electrónico llega a una planta de reciclaje los componentes contaminantes –hasta un 93%– son retirados para su tratamiento y el resto se separan para su reutilización.
Sin embargo, solo reciclamos entre un 15% y un 20% de los aparatos eléctricos y electrónicos.
Los demás terminan en la basura o en vertederos ilegales donde solo se aprovecha el material del que se puede extraer un beneficio y no se tratan los componentes potencialmente peligrosos.
¿No crees que merece la pena hacer un pequeño esfuerzo para cuidar del planeta?